Parlament, Paz y Kyoto

Vivo la jornada de reflexión de las elecciones al “Parlament” desde Madrid, el sábado deposité mi voto por correo, y francamente no es lo mismo…Igual que estas elecciones. Ninguno de los candidatos convence a casi nadie, y somos muchos los que nos acercamos a las urnas (o a la oficina de correos) más por descarte que por verdadera ilusión. De todas maneras los catalanes nos volvemos a jugar mucho en estas elecciones, y sobretodo en los cuatro años próximos de legislatura, si es que llegan a cumplirse…La capacidad de demostrar de una vez por todas que somos y seremos el gran motor de innovación económica y social que la sociedad española del futuro necesita; algo que como sociedad hemos demostrado ser, pero para lo que la clase política nunca nos ha sabido seguir. Lamentablemente no soy optimista, la lucha entre los nacionalismos españoles y catalanes en su versión más excluyente, siempre se encargan de recordármelo.
No puedo evitar aludir a la entrevista de ayer de Francino a Zapatero. Hablaron de ETA y del estado del proceso. Zapatero hermético, como siempre, seguro que es lo que toca; y personalmente confío en la labor del gobierno en esta materia como en su día confié en la de Aznar. Aún así es normal que los ciudadanos sigamos inseguros y a la expectativa. Inadmisible nuevamente la actitud de la oposición, simplemente no se entiende, siguen hablando de rendición; y de traición a los muertos y al estado de derecho. Un “todo vale” que sólo daña a las instituciones y beneficia a los violentos que nunca creyeron en ellas. A pesar del 14M son incapaces de aceptar que la democracia pone a cada uno en su sitio; y que no hace falta dañar lo básico para hacer oposición a un gobierno mediocre en muchos aspectos.
Hoy los periódicos despiertan hablando del cambio climático, un informe avalado por Blair, y por el gran adepto a la causa Al Gore, habla de que se trata del problema más grave al que nos enfrentamos, mucho más importante que el terrorismo internacional. Los de mi generación hemos escuchado esta cantinela desde que tenemos uso de razón. ¿Habrá llegado el momento de hacer algo que funcione? Vuelvo a ser pesimista, y que nadie hable de Kyoto... Debe ser que hoy tengo un mal día